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La sostenibilidad en Fortaps siempre ha sido un pilar clave de nuestra estrategia empresarial. Por ello, no solo nos hemos dedicado a utilizar material reciclado, sino también a reducir al máximo nuestra huella ecológica a lo largo de toda la cadena de suministro, incluyendo nuestro proceso de fabricación. Hoy abordaremos en detalle nuestro proceso de reciclaje.

La sostenibilidad debe ir más allá de procesos de reciclaje

El primer paso que determina la sostenibilidad en la operativa diaria de Fortaps es el uso eficiente de la energía. Invertimos continuamente en mejorar nuestra autosuficiencia energética, utilizando tecnologías de bajo consumo, intercambiadores de calor y paneles solares. Actualmente, contamos con una cubierta solar fotovoltaica que nos permite autogenerar más del 60 % de nuestro consumo energético total.

Además, más allá del proceso de fabricación, la sostenibilidad en Fortaps se refleja en distintas áreas, como la gestión documental totalmente digital, que nos ha permitido eliminar por completo el uso de papel. También hemos apostado por vehículos 100 % eléctricos para nuestra plantilla, lo que contribuye a la reducción de la contaminación acústica y al uso de energía limpia.

 

¿Cómo llevamos a cabo el proceso de reciclaje en Fortaps?

El compromiso con la sostenibilidad en Fortaps comienza con la selección de materias primas. Utilizamos polietileno, un material libre de componentes tóxicos y totalmente reciclable. Por esta razón, hemos descartado otros materiales como el PVC, optando por una materia prima 100 % reciclada.

Si bien el polietileno proviene de un proceso de refinamiento del petróleo crudo a través de la producción de compuestos petroquímicos, su capacidad de reciclaje continuo lo convierte en una opción altamente sostenible. Siempre que se gestione adecuadamente, el uso del polietileno en los procesos de fabricación de piezas como las de Fortaps permite reducir el impacto ambiental, minimizar la necesidad de producir plástico nuevo y, en consecuencia, disminuir el consumo de combustibles fósiles y la generación de residuos.

El plástico ha sido vilipendiado en términos de sostenibilidad, principalmente porque no es biodegradable. Sin embargo, al aplicar un proceso de reciclaje sostenible, como el proceso de reciclaje de Fortaps, logramos que el material se reutilice de forma continua, eliminando así las desventajas de su uso.

 

El proceso de reciclaje de Fortaps paso a paso

El compromiso de Fortaps con la sostenibilidad se basa en la reducción total de los residuos generados en los procesos de fabricación. Para ello, hemos desarrollado un proceso de reciclaje propio, que permite la reutilización completa del material.

Paso 1. Recolección del material sobrante

El proceso de reciclaje de Fortaps comienza con la recolección del material sobrante, que se deposita en un contenedor específico para envases.

Paso 2. Traslado a la planta de reciclaje

Posteriormente, el material es enviado a una planta de reciclaje, donde se tritura junto con otros materiales de la misma composición.

Paso 3. Limpieza del material

Una vez triturado, el material resultante se somete a un proceso de limpieza para eliminar cualquier suciedad o adherencias de otros materiales.

Paso 4. Fusión y reutilización

Una vez que el material está completamente limpio, se funde a altas temperaturas, dando lugar a un nuevo material reciclado listo para ser reutilizado en la fabricación de nuevos productos.

Este proceso de reciclaje permite aprovechar el 100 % del material, siempre que se realice una correcta separación y limpieza. A diferencia de otros materiales, como el papel, que tiene un número limitado de ciclos de reciclaje, el polietileno utilizado en Fortaps puede reciclarse de manera continua. Además, nuestro proceso es altamente eficiente, ya que no requiere grandes cantidades de agua ni energía, lo que lo hace aún más sostenible.

Beneficios del polietileno para la sociedad

El polietileno es un material duradero y altamente resistente, ideal para la fabricación de nuestros productos. Lo hemos seleccionado porque soporta condiciones adversas, como altas temperaturas y humedad, lo que permite que las conteras de Fortaps puedan utilizarse en exteriores y en productos que requieran una larga vida útil.

Además, es un material accesible en términos de coste de producción, lo que facilita su uso en diversas industrias y aplicaciones. Gracias a su versatilidad, el polietileno puede moldearse en distintas formas y densidades, ampliando aún más sus posibilidades de uso.

Beneficios del polietileno para el medio ambiente

Como hemos comentado anteriormente, uno de los aspectos más destacados del polietileno es que es un material 100 % reciclable, lo que contribuye a la reducción de residuos plásticos y permite la creación de nuevos productos a partir de materiales reciclados. Por esta razón, es un pilar fundamental en la estrategia de sostenibilidad de Fortaps, ya que favorece una economía circular limpia.

Otro beneficio clave es la reducción en el consumo de energía y en las emisiones de gases de efecto invernadero. Gracias a su ligereza, el polietileno requiere menos energía en su transporte, disminuyendo así el impacto ambiental asociado a la logística y distribución.

Además, hemos elegido el polietileno para la fabricación de nuestras conteras, tapas y tapones porque actúa como una barrera protectora frente a la contaminación y el deterioro de otros materiales. Esto contribuye a la sostenibilidad, ya que ayuda a reducir el desperdicio y prolongar la vida útil de los productos.

El polietileno en la sociedad actual

En la sociedad actual, materiales como el polietileno se han vuelto indispensables, ya que los sistemas de consumo y producción requieren del uso de plásticos. Sin embargo, su reciclabilidad, versatilidad y accesibilidad han permitido su adopción en una amplia gama de sectores y aplicaciones.

Se utiliza en embalajes, para mantener los alimentos frescos, o en la fabricación de productos como las conteras, tapas y tapones de Fortaps. Gracias a su menor huella ambiental, el polietileno reciclable representa una alternativa más sostenible, que combina los beneficios tradicionales del plástico con un impacto ambiental reducido.

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